Cómo afectan los neurotransmisores de dopamina el comportamiento
Tabla de contenido:
Neurotransmisores y neuronas
El cerebro está formado por un gran grupo de células llamadas neuronas. Las neuronas son la unidad funcional del cerebro y controlan todos los procesos neurológicos, incluidos los pensamientos y el comportamiento. El sistema nervioso es esencialmente un grupo de neuronas interconectadas. Las neuronas se comunican entre sí a través de pequeños cruces llamados sinapsis. Las neuronas utilizan mensajeros químicos especiales, llamados neurotransmisores, para comunicarse a través de estas sinapsis. Los neurotransmisores son liberados por una neurona en la sinapsis y luego se unen a las otras neuronas. Estos neurotransmisores pueden activar otros neurotransmisores o hacer que sean menos activos. La dopamina es un neurotransmisor que puede activar las neuronas en muchas partes diferentes del cerebro.
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Dopamina y esquizofrenia
Una de las funciones de la dopamina es controlar los pensamientos y la toma de decisiones. La dopamina actúa como una especie de guardián para que los impulsos y los pensamientos se vuelvan conscientes y se pueda actuar sobre ellos. Las señales neuronales que producen altos niveles de dopamina pueden continuar. Un artículo de 2005 en el "Journal of Computational Neurology" explica que la dopamina es la fuerza impulsora detrás de la generación de ideas y el impulso creativo.
Dr. Chudler en la Universidad de Washington también explica cómo la dopamina se puede relacionar con ciertos trastornos psiquiátricos, como la esquizofrenia. Los altos niveles de dopamina podrían, en teoría, permitir que un flujo de pensamientos e impulsos fluya por todo el cerebro, lo que llevaría a las alucinaciones y delirios que son un sello distintivo de la esquizofrenia. Muchos medicamentos que se utilizan para tratar la esquizofrenia (también conocidos como antipsicóticos) funcionan al reducir los niveles de dopamina en el cerebro o al bloquear los efectos de la dopamina.
Adicción
Además de su papel en la supervisión de pensamientos, acciones y comportamiento, la dopamina también tiene un papel muy importante en la motivación. En junio de 2009, "Nature" publicó un artículo que ayuda a detallar esta otra función de la dopamina. Las neuronas sensibles a la dopamina están altamente concentradas en una parte del cerebro llamada substantia nigrans. Esta parte del cerebro controla la sensación de placer y motivación. Las sensaciones placenteras provocan la liberación de dopamina en el cerebro, lo que hace que estas neuronas se activen. Este mecanismo subyace a la euforia causada por la adicción a los estimulantes (como las anfetaminas), los narcóticos y el alcohol. El uso de estas sustancias hace que se libere una explosión repentina de dopamina en la sustancia negra, que le comunica al cerebro que algo muy placentero está ocurriendo. Esta oleada de dopamina también es responsable de generar una gran motivación para la adquisición de más drogas o alcohol.